Recolectamos nuestra miel entre agosto y octubre, según la climatología. Extraída al modo tradicional de los panales, se filtra por decantación natural. Gracias a ello, y al buen hacer atesorado tras más de 30 años de experiencia apícola, obtenemos una miel de excelentes pureza, sabor  y propiedades.

   Somos una pequeña empresa familiar que contamos con diligentes trabajadoras, nuestras abejas, a las que cuidamos y que nos obsequian con una deliciosa miel. Este néctar es fruto de la rica diversidad floral de las montañas en donde se encuentran nuestras colmenas, con predominio del brezo y otras flores de alta montaña, propias de un entorno natural salpicado de bosques de robles y hayas.

   La apicultura ha sido para nosotros una pasión desde hace décadas. Una actividad que nos permite estar en contacto con nuestro bello entorno natural, al tiempo que contribuimos a la conservación y expansión de su biodiversidad.

   Comercializamos nuestra cosecha anual directamente al consumidor en nuestro entorno geográfico, y a todo aquel que quiera disfrutarla, gracias a esta web.

   Nuestra miel se caracteriza por tener una oscura tonalidad ámbar, con tonos rojizos y por presentar un aroma y sabor sutiles. Se trata de una miel pura, densa, y que cristaliza gradualmente de forma natural tras su envasado. Sin alteraciones térmicas en su extracción y fruto de nuestras colmenas asentadas en el Valle Alto del río Oja, en los montes riojanos de la parte norte de la Sierra de la Demanda.

Son conocidas las propiedades de la miel de brezo como antiséptico, fortificante, diurético y bactericida, entre otras aplicaciones terapéuticas. Se recomienda su consumo para tratar procesos reumáticos y renales. Es muy apreciada por los deportistas, ya que sus nutrientes son asimilados rápidamente por el organismo.